Páginas

28 junio 2020

ENSALADA DE BROTES CON MANZANA, QUESO Y NUECES #ASALTABLOGSINVISIBLE

Este año estoy de un vicioso mangueril que no os podéis imaginar. Vamos, que me cuesta mucho renunciar a "robar" a alguien ¡y ya es el segundo asalto invisible al que me apunto! Último domingo de mes y toca de nuevo edición especial del reto #Asaltablogs. Y es que esta temporada llega a su fin pero había que despedirla a lo grande con una nueva convocatoria del Asaltablogs Invisible donde todos asaltamos a todos...¡superdivertido!


A mi esto de recibir el correo con nuestro "blog amigo invisible" me hace una ilusión tremenda. Y si la agraciada que me toca es alguien que me encanta ya es de traca. Se trata de Ro, cuyo blog Recetitas con Ro es siempre un auténtico placer visitar, lo tiene todo tan limpio y ordenado que me puedo pasar las horas dándome paseos...Que es justamente lo que me ha pasado porque me es muy difícil decidirme por una sola receta. De hecho ¡he cambiado tres veces de opinión!


Pero mira tu que al final he elegido para este asalto su ensalada de brotes con manzana, queso de cabra, nueces y vinagreta de miel y las razones han sido varias. La primera es que esta semana sólo apetecen cosas fresquitas, estamos a 30 ºC (que se agradece, oye) y lo de acercarme al horno como que lo llevo mal. La segunda es que justo esta semana he preparado mis brotes de lentejas y me parecía la ocasión ideal para usarlos. Y la tercera ha sido el aprovechamiento porque también tenía un trozo de queso mozzarella en la nevera que había guardado en su propio suero pero que había que usar ya (espero que Ro me perdone la licencia porque aquí el rulo de cabra no se encuentra).

Ingredientes: 150 g brotes de lentejas; 150 g mozzarella; 1 manzana verde; 50 g nueces (normales y pecanas); 1 cucharada miel; 2 cucharadas vinagre; 4 cucharadas aceite de oliva; sal; pimienta.

Preparación: Los brotes se pueden usar tal cual o, si lo preferís, se pueden escaldar 1 minuto en agua hirviendo. En el último caso, colar y eliminar el agua. Poner en una fuente. Añadir la mozzarella desmenuzada con las manos (¡siempre!), las nueces picadas con las manos y la manzana (pelada y sin semillas) en daditos. Mezclar todo y dejar en la nevera mientras preparamos la vinagreta.

En un bote de cristal poner el aceite, vinagre, sal, pimienta y miel, cerrar la tapa y agitar bien para emulsionar la vinagreta. Añadir a la ensalada, mezclar y servir fresquita.


Pues con esta receta tan rica me despido del #asaltablogs y nos vemos en la siguiente temporada. ¡Ha sido un placer asaltarte querida Ro!


14 junio 2020

GALLETAS DE CHOCOLATE (CRISPY AND CHEWY)

Reconozco que soy fan del Canal 24Kitchen. Me puedo pasar las horas viendo cocineros y recetas y darme cuenta de lo que fácil que parece para ellos y de lo dificil que, a veces, se me hace a mi, especialmente la repostería. Porque reconozcámoslo, yo no he nacido con esa mano mágica para los dulces...o puede ser que no tenga la suficiente paciencia.

Y mira que es como seguir una receta química, pero luego tienes que tener mano para decorar, montar, ajustar...y que te quede una preciosidad y yo eso no lo tengo. Tampoco soy tan dulcera, vamos, pero si que me gusta ver cómo otros hacen maravillas. Y eso me pasa con un programa que he descubierto recientemente en el susodicho canal de TV que se llama "Flour Power".

Es un programa de repostería divertido, lúdico y súper elegante ubicado en una cocina de inspiración retro, donde la bellísima anfitriona (Jessica McGovern) muestra lo fácil que es hornear, a la vez que desmitifica la ciencia, el arte y la magia de hornear, inspirando a los espectadores a hacer deliciosas y hermosas preparaciones con ingredientes saludables. ¡Una gozada!

Y mira tu que hace unos días preparaba sus famosas "crispy & chewy chocolate chip cookies", o lo que es lo mismo, sus dos variedades de galletas de chocolate (crujientes y masticables) que me llamaron poderosamente la atención porque la receta era igual para ambas galletas pero lo que cambiaba era la textura de la mantequilla y el tipo de azúcar utilizado. Así que me dije ¡tengo que probarlas! Bueno, eso ¡y que a mi Danny se le antojaron las galletas de chocolate!


Visualmente las dos son iguales, lo que cambia es que en un caso son más crujientes (las que le gustan a Danny) y en el otro son más tiernas al mordisco (estas son las mías) así que yo os traigo las dos recetas en una misma entrada para que hagáis las que más os guste. Yo las he regalado por el día de la madre y fueron un éxito ¡os lo aseguro! Además, si las guardáis en una lata aguantan muy bien.

Ingredientes para la versión crujiente (crispy): 240 g harina; 2 g bicarbonato de sodio (baking soda); 2 g sal; 90 g mantequilla derretida; 90 g azúcar blanca; 90 g azúcar morena; 1 huevo; 1/2 cucharadita esencia de vainilla; 240 g chocolate negro (75%).

Ingredientes para la versión tierna (chewy): 240 g harina; 2 g bicarbonato de sodio (baking soda); 2 g sal; 90 g mantequilla en pomada; 180 g azúcar morena; 1 huevo; 1/2 cucharadita esencia de vainilla; 240 g chocolate negro (75%).

Preparación: Las dos galletas se hacen con el mismo procedimiento. En un bol mezclar la harina tamizada con el bicarbonato y la sal.

En el bol de la amasadora poner la mantequilla (derretida o en pomada, según la galleta) y agregar el azúcar y batir con varillas hasta formar una crema. Añadir el huevo batido y la vainilla y continuar batiendo. Finalmente, ir añadiendo los ingredientes secos poco a poco sin dejar de batir.

Picar el chocolate en el robot y añadir a la masa, mezclando con una espátula. Poner la masa en un tupper cerrado y dejar en la nevera durante la noche. Sacar unos 30 minutos antes de empezar a hacer las galletas. Precalentar el horno a 170 ºC (calor arriba y abajo sin ventilador).

 


Coger porciones de masa con una cuchara y formar bolas. Colocar en la bandeja del horno forrada con papel sulfurizado y bien separadas entre ellas (yo he puesto 3 por fila). Hornear durante 17 minutos las galletas tiernas y durante 25 minutos las crujientes. ¡Están de muerte natural!

Estas son la versión crujiente:


Y estas son las más tiernas:



10 junio 2020

HUEVOS FLORENTINA

Hoy os traigo una de esas recetas muy sencillas y rápidas que os pueden solucionar una cena. La receta se basa en las famosas espinacas a la florentina que popularizó Catalina de Medicis, oriunda de Florencia. Y es que dicen que, cuando fue a la corte francesa a casarse con Enrique II, se llevó con ella la receta y los cocineros italianos que se la elaboraban, ya que no podía renunciar a su exquisito sabor. ¿La verdad? No le faltaba razón...

Ingredientes: 2 huevos; 300 g espinacas; 2 lonchas jamón serrano; 25 g mantequilla; 1 cucharada harina; 1 vaso leche; queso rallado; sal; pimienta.

Preparación: Cocer las espinacas durante 5 min en agua con sal, eliminar bien el agua (yo uso una centrífuga) y cortarlas bien menudas, repartiéndolas en cazuelitas individuales cubriendo toda la base. Salpimentar.

En un cazo con agua hirviendo y vinagre cocinar los huevos durante 4 min, extrayéndolos con una espumadera y colocándolos sobre el lecho de espinacas.

Picar el jamón y repartir por encima del huevo.

Preparar una bechamel. En un cazo poner a fundir la mantequilla, añadir la harina y mezclar bien con una cuchara de madera. Ir añadiendo la leche poco a poco y sin dejar de remover hasta que espese. Salpimentar al gusto.

Cubrir los huevos con la bechamel, espolvorear con queso rallado y hornear a 180 ºC durante 10 min. Servir inmediatamente.



07 junio 2020

BRIOCHE DULCE DE YOGUR

Sencillamente, no doy para más. Estas últimas tres semanas de trabajo han sido tan intensas que, literalmente, no me quedan ganas de sentarme a escribir las recetas que tengo hechas. ¡Y mira que estaban ricas! La cosa es que no dejo de cocinar pero se me acumula la faena de publicar. En fin...

Hoy os traigo uno de esos dulces momentos que el azar pone en tu camino sin comerlo ni beberlo. Ya lo he dicho muchas veces, yo soy más de salado, pero es verdad que estando en casa tengo más tiempo de preparar algún dulce para ese capricho de cada merienda que mi costilla no suele perdonar, él que no tiene problemas de ganar peso ¡claro!

Y mira por donde, ojeando la blogosfera, aterriza en mis manos esta receta de una chica italiana a la que puse estos mismos ojillos O_O porque decir que está rico es quedarse muy corta. Porque los dulces con yogur me encantan, creo que tienen una esponjosidad fantástica y este tenía, además, una forma preciosa. ¡Y tan fácil! ¡Y aguanta durante una semana perfectamente!


Ingredientes: 100 ml leche; 1 sobre levadura seca de panadería; 125 g yogur griego; 100 g azúcar; 80 g aceite girasol; 1 huevo; 1/2 cucharadita esencia vainilla; 1/2 cucharadita esencia limón; 500 g harina; azúcar glas.

Preparación: En el bol de la amasadora poner la leche templada (20 segundos al microondas, 700 W) con la levadura y comenzar a mezclar. Añadir el yogur y continuar batiendo. Ir añadiendo, secuencialmente y sin dejar de batir, el azúcar a cucharadas, el huevo batido, el aceite y las esencias. Cambiar al accesorio gancho.

Tamizar la harina e ir añadiendo a la mezcla anterior a cucharadas hasta que se integre completamente y la masa se enganche en el gancho y se despegue de las paredes. Es el momento de pasar a la mesa y continuar amasando con las manos hasta obtener una masa elástica y lisa que ya no se pega a las manos.

Formar una bola, poner en un bol profundo, hacer una incisión en cruz en la masa, cubrir con papel film y con un trapo y dejar levar durante 2 horas en el horno apagado y con la luz encendida. Os debe quedar así:


Pasar a la mesa de nuevo (muy ligeramente enharinada) y trabajar con las manos durante un par de minutos. Dividir la masa en porciones de unos 120 g (a mi me han salido 8) y formar bolas con cada porción.

Engrasar un molde con aceite y colocar las bolas en todo el perímetro, unas junto a otras, de esta forma:


Cubrir con papel film y con un trapo y dejar levar durante 30 minutos (de nuevo en el horno). os quedará así:


Hornear a 180 ºC (calor arriba y abajo sin ventilador) durante 35-40 minutos. Sacar y dejar templar antes de desmoldar. Colocar en un plato, pintar con un poco de agua y espolvorear azúcar glas por encima. Lo podéis tomar tal cual o untando Nutella por encima ¡mmmmmmmmmmmmmm!