¡Madre mía como pasa el tiempo! Si ya se ha acabado este mes de Noviembre y enseguidita cambiamos de año...¡pffffffff! Menos mal que vivimos la vida a tope y no dejamos escapar ni un minuto sin disfrutar de este maravilloso regalo que es la vida...
En fin, que para acabar el mes he pensado traeros una receta que nos encanta en casa y que hemos hecho, codo con codo, mi Danny y yo. ¡Está de rechupete! Y no es nada complicada, como es habitual en esta casa, así que paso a contárosla y espero que la disfrutéis.
Ingredientes: 2 cebollas pequeñas; 1 diente ajo; 2 zanahorias pequeñas; 6 cucharadas salsa tomate; 9-12 hojas lasaña; 300 g espinacas frescas; 4 champiñones grandes; 80 g queso parmesano rallado; sal; pimienta; 2 cucharaditas orégano; aceite; 30 g mantequilla; 2 cucharadas harina; 400 ml leche.
Preparación: Pelar y picar las cebollas y el ajo. Raspar las zanahorias y picar. En un wok poner a calentar un fondo de aceite y sofreír la cebolla, el ajo y la zanahoria a fuego medio. Añadir los champiñones lavados y picados y continuar rehogando.
Añadir la salsa de tomate, salpimentar al gusto y añadir el orégano. Mezclar y continuar rehogando a fuego suave. Por último ir añadiendo poco a poco las espinacas conforme se vayan integrando en la mezcla. Rehogar unos minutos, apagar el fuego y reservar.
Preparar la bechamel. Para ello poner en un cazo a calentar la mantequilla y cuando esté derretida añadir la harina y remover bien con una cuchara de madera. Añadir la leche y continuar removiendo para deshacer cualquier grumo. Salpimentar al gusto, añadir la mitad de queso parmesano y cocinar hasta que empiece a espesar. Apagar el fuego y reservar.
En una fuente alargada poner un fondo ligero de bechamel. Encima colocar 3-4 hojas de lasaña (depende de lo grande que sea la fuente), una al lado de otra, hasta cubrir la base. Colocar la mitad del relleno de espinacas y cubrir con un poco de bechamel. Repetir una segunda vez con una capa de lasaña, el resto del relleno y una de bechamel. Cubrir con la última capa de hojas de lasaña y repartir el resto de la bechamel por encima cubriendo bien. Espolvorear con el resto de queso parmesano.
Cocinar en el horno, precalentado a 180 ºC (arriba y abajo con ventilador), durante 30 minutos. Servir inmediatamente.