28 octubre 2018

CÓCTEL DE SIDRA Y GRANADA #ASALTABLOGS

Pues aquí estamos de nuevo porque es último domingo de mes y toca reto #Asaltablogs y, en esta ocasión, la asaltada ha sido Maria de Los blogs de María, una mujer de lo más ocupada ya que no lleva uno sino 3 blogs con colaboraciones. ¡Ahí es nada!

A ella le he robado una de las recetas de su blog. Esta vez me apetecía cambiar radicalmente y me he decantado por una bebida, concretamente su cóctel moho y zumo de granada natural que he versionado a mi manera sin perder la esencia y que ha resultado ser una bebida refrescante y rica que me ha permitido utilizar una fruta que no suelo comprar tan a menudo, la granada. ¡Gracias por la receta!


Ingredientes: 1 botella sidra; 2 granadas; azúcar.

Preparación: Extraer los granos de la granada. Para ello yo pongo un cuenco de agua grande y corto los dos extremos de la granada y después a lo largo de los gajos (como una naranja). En el agua voy desgranando cada parte de forma que la mayor parte de los granos se van al fondo y quedan flotando las pieles internas. Después cuelo el agua y acabo de limpiar.

En la receta original usa hielo pero yo he preferido congelar los granos de granada durante una noche. Así, al triturar, ya está frío y puedo usar algunos granos como decoración.

En el vaso de la batidora poner los granos de fruta y añadir un poco de sidra e ir batiendo y añadiendo más sidra hasta formar una crema líquida.

Preparar las copas mojando el borde con un poco del cóctel y untando de azúcar. Servir el coctel en las copas y decorar con algunos granos de fruta congelada. ¡Rico rico!



Pues con esta receta participo en el #Asaltablogs y a ver qué cosas ricas han birlado mis compis.


24 octubre 2018

ENSALADA DE PASTA CON ALIÑO DE PESTO #unomasmenos100desperdicio0

Siempre que puedo intento participar en la iniciativa de mi amiga Marisa, que dirige el blog Thermofan y con la que he compartido muchas aventuras culinarias, "1 +/- 100, desperdicio 0", un proyecto que pretende concienciar sobre el reciclaje, la reducción de desperdicios, el ahorro, la defensa del medio ambiente…En su entrada ella lo explica divinamente.

Increíblemente no había publicado esta receta aún en el blog y eso que es una de esas que siempre hago de reciclaje cuando no se que hacer o no tengo ganas y miro en la nevera y encuentro cosas...Esta que os traigo se origina en la necesidad de acabar con una planta de albahaca a la que ya no le quedaban demasiadas hojas porque había utilizado la mitad para otra receta.

Veréis...aquí la albahaca la venden siempre biológica y en forma de plantita, lo cual no esta mal porque así de paso te decora la cocina pero, a medida que le vas cortando hojas, la pobre va adquiriendo un aspecto de lo más triste...Con las hojas que quedaban, como digo, preparé un pesto casero tal y como os cuento aquí. Este iba a ser el condimento de la ensalada que he preparado con un resto de pasta, un par de tomates de esos que se te quedan al final del cajón de las verduras y medio sobre de queso feta que me había olvidado en el cajón de los quesos. ¡Una cena sencilla pero muy rica!

Ingredientes: 200 g pasta (en mi caso fusilli de colores); 2 tomates; 100 g queso feta; salsa pesto.

Preparación: Cocer la pasta según indicaciones del envase. Escurrir bien y colocar en la ensaladera.

Cortar los tomates y el queso feta en dados y añadir a la pasta. Salpimentar al gusto. Añadir el pesto y mezclar bien. Poner en la nevera a enfriar durante 1 hora. Servir. Es un plato completo que incorpora carbohidratos, proteínas y grasas así que ¿que más queréis?



¡Espero que te guste amiga!


21 octubre 2018

PARDULAS #CocinasdelMundoCerdeña

Las pardulas son unos dulces rellenos de queso que se encuentran entre las delicias sardas más típicas durante la Pascua. Según la zona donde se cocinan reciben nombres diferentes como pardula (zona sur-occidental de Cerdeña), casadina (en Nuoro) o casgiaddina (en Sassari y Logudoro).

Sea como fuere, llevando como llevo un reto de cocina regional italiana, mis amigas de La cajita de Nieves y Elena me lo pusieron muy fácil eligiendo como destino para el reto Cocinas del Mundo la hermosísima isla de Cerdeña...si, una pequeña licencia con la Ñ.

Sin embargo, he dejado de lado mis libros y me he ido a buscar propuestas diferentes y poco conocidas hasta para mi, que he tenido la suerte de visitar la isla en varias ocasiones y disfrutar de su gastronomía tan rica. Así que, contrariamente a lo que suele ser habitual en mí, me fui directa a los dulces sardos. ¡Y encontré estos! Son muy fáciles de preparar y tienen una forma preciosa.

Cuando se trata de cocina italiana me gusta mucho ojear vídeos en internet, me encanta escuchar a las cocineras con su acento maravilloso explicar las recetas paso a paso así que no es de extrañar que me haya basado en esta receta para traeros mi propuesta del mes. Eso sí, la he reducido a la tercera parte porque, como siempre, somos solo dos y no es cuestión de atiborrarse. No le he puesto azafrán como la receta original (que seguro que le da su punto) porque sólo lo tengo en hebra y no me apetecía ponerle colorante como sustituto. ¡Vamos allá!


Ingredientes para la masa: 125 g harina 00; 1/2 cucharada mantequilla; 60 g agua.

Ingredientes para el relleno: 330 g ricotta; 50 g azúcar; 1 yema huevo; piel de limón rallada.

Preparación: Empezar preparando el relleno. En un bol mezclar bien todos los ingredientes con la varilla hasta obtener una crema. Dejar reposar.

En otro bol poner la harina, hacer un hueco en el centro y añadir la mantequilla y el agua. Amasar hasta obtener una masa lisa y elástica. Dividir la masa en dos para que sea más fácil y estirar con la máquina de hacer pasta hasta obtener una lámina muy fina (yo voy pasando secuencialmente del 0 hasta el 5). Si no tenéis máquina lo haréis con el rodillo.

Cortar círculos de pasta con la ayuda de un vaso. Lo que sobre de masa lo volvéis a utilizar. A mi me han salido 16 discos. Encima de cada disco poner dos cucharaditas de relleno en el centro e ir pinzando la masa 6 veces con los dedos pulgar e índice formando la característica forma:

 

 

Precalentar el horno a 180 ºC. Colocar las pardulas encima de la bandeja del horno forrada con papel sulfurizado y hornear hasta que el relleno esté dorado (en mi horno unos 45 minutos). Dejar entibiar y servir espolvoreadas con azúcar glas o con un hilo de miel de castaña.


Con esta receta participo en la edición Cocinas del Mundo - Cerdeña y me voy a ver el resto de recetas participantes. ¡Hasta el próximo destino!



14 octubre 2018

TARTA DE SALMÓN Y PUERRO - 12 RECETAS, 12 BLOGUERS

¡Buenos días! Ya sabéis que este año he puesto de nuevo en marcha la iniciativa 12 Recetas, 12 Bloguers que pretende homenajear, cada mes, a esos bloguers (y sus blogs) que siempre están ahí, a las que ya considero amigos aunque no nos conozcamos en persona. Y ¿cómo se devuelve tanto cariño y apoyo? pues de la mejor manera que se me ocurre es cocinando una de sus recetas.

Este mes de Octubre he escogido, y me apetece mucho, a Mª José, directora del blog Aquí se cuece jugando, a quien sigo desde hace tiempo ya que tuvo a bien unirse a mi reto de cocina regional italiana. Vive en Valencia y le gusta cocinar y disfrutar con una buena comida. Pero lo que más le gusta es jugar (en negrita y con letra gorda) con la comida.

Una de las cosas que más me gusta de su blog son sus comidas temáticas: comida de un color, temáticas dirigidas a juegos, a los siete pecados capitales, a resolver un asesinato...No sólo cocina sino que piensa en el tema, en el decorado, en los platos, en lo que pensarán y dirán sus comensales...¡Me parece divertidísimo! Por eso no podéis dejar de visitarlo. Bueno, por eso y por la cantidad de cosas ricas que prepara...

Para este homenaje me he decantado por una receta de las suyas porque Mª José también participa en varios retos que compartimos y es que cuando vi su tarta de salmón y ricotta literalmente me enamoré. Me gustan muchísimo las tartas saladas, tengo varias en el blog, pero ninguna con pescado y el salmón es uno de esos que en casa consumimos mucho. Tengo suerte de encontrarlo en lomos (congelado claro) totalmente limpios así que me pareció una idea fantástica. ¡Y no me he equivocado! Casi no he cambiado su receta pero es que no hace falta ¡está buenísima!


Ingredientes: 250 g salmón; 1 puerro grande; 2 cebolletas (aquí son del tamaño de los ajetes); 3 huevos; 125 g ricotta; sal; pimienta; mantequilla; 5 hojas cuadradas de masa quebrada congelada.

Preparación: Cortar el salmón en daditos pequeños. Limpiar y picar las cebolletas. Limpiar el puerro y cortar en aritos.

En una sartén poner a fundir una cucharada de mantequilla y rehogar el puerro durante 5 minutos. En un bol batir los huevos y mezclar con la ricotta deshaciendo los grumos. Añadir el puerro, el salmón y las cebolletas y mezclar todo. Salpimentar al gusto y reservar.

Dejar descongelar la masa durante 10 minutos. Como aquí no venden de forma redonda, he juntado todas las placas cuadradas y he vuelto a estirarla en la mesa, ligeramente enharinada, con ayuda del rodillo. Engrasar ligeramente el molde y colocar la masa cubriendo fondo y pared. Eliminar el exceso de masa. Verter el relleno y repartir bien por toda la superficie.


Precalentar el horno a 180 ºC. Hornear la tarta (calor arriba y abajo sin ventilador) durante 35 minutos. ¡Servir y disfrutar!


Antes de despedirnos hasta el mes que viene (¿quién será la próxima?), he pedido a Mª José que conteste a un pequeño test con el que sabremos un poquito más de ella. ¡Gracias guapa, por la receta y por prestarte a contestar!
  1. Un ingrediente: Me encanta los guisos y la cocina de cuchara por eso escojo un ingrediente bastante común a esos guisotes, la cebolla
  2. Una fuente de inspiración: El mar. Nada mejor que pasear sin zapatos por la orilla de la playa para dejar la mente como nueva para nuevas ideas
  3. Un utensilio: La cuchara
  4. Una afición: Viajar
  5. Un destino: Casi cualquiera, pero bueno, por elegir uno, elijo mi próximo destino: San Francisco
  6. Una comida: Guisado de carne
  7. Un libro: El juego de Ende (Orson Scott Card)
  8. Una película: La vida de Brian 
  9. Un sueño: Llegar a tener nietos y criarlos, o sea volver a estar en contacto con niños pequeños
  10. Cocinar es... un placer
¡Ah! Y si te apetece compartir la entrada ¡estás en tu casa! ¡Un besazo!


09 octubre 2018

PALITOS DE QUESO DE LAVANDA CON SALSA PICANTE #CocinArte

No siempre llego a todo aunque lo intento...El mes pasado no pude pero este no quería perderme un reto que me parece precioso y que lleva mi querida Maria, de In my little kitchen. Se trata de CocinArte, un reto que nos acerca el arte a través de la propuesta, cada mes, de un cuadro, en el que nos inspiraremos para cocinar un plato dulce o salado.

El cuadro elegido para este mes es “L'Escarpolette” (ca 1767, óleo sobre lienzo, 81 x 65 cm, Wallace Collection, London) pintado por Jean-Honoré Fragonard tras un encargo de un rico barón como homenaje a su amante. El cuadro se ha convertido en el símbolo de toda una época, el Rococó, por su refinamiento y sensualidad. Representa una escena galante en un ambiente idílico: una joven se balancea en el columpio que empuja un hombre mayor (seguramente su marido, relegado a la sombra) mientras que abajo, a la izquierda, aparece un joven  que mira debajo de su falda (amante de la mujer, luce en primer plano) entre vegetación y flores.


Reconozco que le he dado muchas vueltas al cuadro antes de decidir qué quería hacer...hasta que abrí la nevera y vi el queso de cabra de lavanda que había comprado en mi última visita a uno de los lugares más bonitos del país en el que vivo: Zaanse Schaans. Siempre que voy hago una parada en Kaasmakerij Catharina Hoeve, una tienda réplica de una granja de quesos tradicional donde se pueden comprar todo tipo de quesos. También hacen demostraciones en 10 idiomas diferentes para ver todo lo relacionado con la producción del queso y, claro, puedes probar algunos de esos deliciosos quesos. ¡Esta es mi parte favorita!

Fue así como descubrí el queso de lavanda que os comentaba, con un precioso color y un sabor maravilloso. De hecho, fue el color y el sabor lo que me transportó directamente al cuadro...


El cuadro, para mi, habla de secretos, de descubrir, de sensualidad, de sentimientos agridulces...y a mi se me ocurrió encerrar este queso tan especial en pasta filo y preparar unos palitos de queso fundido, que son uno de los snacks más típicos aquí, acompañados de una salsa agridulce picante...¡Y me ha molado mucho! La receta es muy sencilla, es el proceso de asociación lo que me ha fascinado y, de repente, me he encontrado literalmente comiéndome el cuadro con una sonrisa picarona...

Ingredientes para los palitos: 5 hojas pasta filo; queso de lavanda; mantequilla.

Ingredientes para la salsa: 50 ml vinagre; 3 cucharadas azúcar; 1 cm jengibre fresco; 1 chile picante: 1 diente ajo; 100 ml agua; 1 cucharadita maicena.

Preparación: Empezar preparando la salsa picante agridulce. En el vaso de la batidora poner el vinagre, el azúcar, el jengibre pelado y picado, el chile picado y sin semillas, el ajo pelado y picado y el agua (reservar 3 cucharadas) y batir hasta que quede todo integrado.

Pasar a un cazo y cocinar a fuego suave durante 5 minutos para que evapore un poco el vinagre y se concentre el azúcar. Añadir la maicena disuelta en las cucharadas de agua fría y dejar cocinar unos minutos más hasta que la salsa espese. Dejar enfriar.

Cortar el queso en bastones de largo un poco menos que el ancho de la pasta filo. En mi caso uso hojas de pasta filo cuadradas que corto por la mitad. Untar la pasta filo con mantequilla derretida (en el microondas, 30 segundos a 700 W) por ambos lados. Colocar el queso a lo largo de uno de sus lados cortos, doblar los extremos opuestos de la masa sobre los extremos del queso y enrollar la masa sobre el queso como si fuera un burrito. Colocar los palitos en la bandeja del horno forrada con papel sulfurizado con la abertura hacia abajo.

 

 

Hornear a 200 ºC (calor arriba y abajo sin ventilador) hasta que estén dorados. Acompañar con la salsa picante y, en mi caso, con una ensalada.





Pues con esta receta participo en el reto CocinArte y os dejo aquí el recopilatorio completo.


04 octubre 2018

PINZA - RETO DULCE CRI: EMILIA-ROMAGNA

¡Buenos días! Si ayer estaba contenta de presentaros las versiones de nuestra propuesta salada para este primer mes de la tercera temporada, hoy lo estoy doblemente ya que os traigo la propuesta dulce del Reto Cocina Regional Italiana de la que, muy probablemente, no habéis oído hablar nunca.

Antes de contaros la historia de la receta y su origen, voy con la preparación de mi versión. He adaptado los ingredientes a la mitad ya que en casa somos dos y me habría salido un dulce inmenso. Tampoco he podido utilizar la mermelada original ya que aquí en Holanda no se encuentra así que la he sustituido por otra muy rica también. Eso si, la receta es de chuparse los dedos...¡y no bromeo!


Ingredientes para la masa: 250 g harina 00; 100 g azúcar, 2 huevos, 1 sobre levadura seca; 60 g mantequilla, 25 g leche templada.

Ingredientes para el relleno: 300 g mermelada de cerezas; 45 g uvitas pasas; 40 g piñones.

Preparación: En el bol de la amasadora poner la harina y mezclar con el azúcar y la levadura. Abrir un hueco en el centro y poner los huevos, la mantequilla blandita y la leche templada. Amasar a velocidad 2 con la pala de amasar hasta obtener una masa lisa que se despega de las paredes.

Pasar la masa a la superficie de trabajo y extender con el rodillo en una lamina de 1 cm de grosor. Cortar la masa sobrante para dejar la lámina en forma de rectángulo (la masa que sobra se puede reutilizar para hacer otras cosas).

Aparte en un bol mezclar todos los ingredientes del relleno. Extender por toda la masa dejando un dedo por cada lado libre. Enrollar la masa sobre si misma en forma de rulo y colocar con el cierre hacia abajo sobre la bandeja del horno forrada con papel sulfurizado. Cerrar bien los extremos. Pintar con huevo batido y decorar (en mi caso) con unos corazones de colores por encima.


Hornear la pinza a 180 ºC (calor arriba y abajo sin ventilador) durante 40 minutos. Servir templada o, mejor aún, fría porque está mucho más rica. Para conservarla yo la envuelvo en papel de horno. Es probable que os pase como a mi que parte de la mermelada se salió al romperse la masa por arriba así que yo la muestro tal cual, sin trampa ni cartón.



La pinza es un dulce que proviene de la tradición rural de Bologna, capital de la Emilia-Romagna. Generalmente se preparaba durante las fiestas navideñas aunque ahora se consume durante todo el año. Su receta aparece por primera vez en 1644 en el volumen L'economia del cittadino in villa de Vincenzo Tanara. El nombre deriva, muy probablemente, de su forma porque se presenta como un rollo de masa dura que encierra en su interior la mostarda bolognese.


La auténtica mostarda bolognese, que es diferente de la mantovana, no debe confundirse con una mostaza. Es una mermelada dulce de la que no hay una única receta pero cuyo ingrediente obligatorio es el membrillo. Luego se le pueden agregar manzanas y peras e incluso ciruelas. Se solía hacer en las casas de los campesinos para usarla en postres como tartas, ravioli o la propia pinza. Como os he comentado, aquí no encuentro membrillos y menos la mermelada así que en mi caso la he cambiado por una de cerezas. Os dejo la receta original:


La cucina regionale italiana in oltre 5000 ricette (Alessandro Molinari Pradelli)

Y ahora vamos con las contribuciones de las participantes de este mes que son todas una maravilla ¡GRACIAS!

Mar nos ha preparado, a pesar de todas las dificultades, su versión con membrillo y nueces que estaba muy rica

Natalia, desde Poesía culinaria - sabores de Nati, nos trae su versión con parte de harina integral y con el relleno preparado por ella... ¡un lujo!

Catina, desde La cocina de Catina, vuelve al reto por la puerta grande con su fantástica versión de este dulce

Josefina, desde Josefina en Italia, vuelve al reto después de mucho tiempo con su versión rellena de mostarda...¡que bien!


Y finalmente Bea, desde Sweet cookies by Bea, se ha decantado, como no podía ser de otra manera, por la opción dulce ¡mmmm!


¡Nos vemos el mes que viene con nueva propuesta y anfitriona!


03 octubre 2018

PARMIGIANA DI MELANZANE - RETO SALADO CRI: CAMPANIA

¡No os podéis imaginar la ilusión que me hace estar de vuelta hoy día 3! Porque eso significa que...¡vuelve el Reto Cocina Regional Italiana! ¡woooooooohoooooooooooo! Después de un descanso de 9 meses, y porque se que muchas lo echáis de menos, he decidido reabrir una nueva edición ¡y van 3!

La mecánica será la de siempre pero a esta convocatoria se han apuntado muchas nuevas participantes que espero se diviertan y aprendan tanto como las que ya llevan en el reto unos cuantos años...

Sin más dilación, vamos con la propuesta salada que es la que toca hoy, un clásico de la cocina tradicional de nuestro país hermano y que ha tenido un éxito sin precedentes en el reto.

Ingredientes: 4 berenjenas; harina (para rebozar); aceite; 40 g mantequilla; 2 cebollas; 2 dientes de ajo; 2 cucharadas harina; 8 tomates grandes (aprox 1,3 kg); 2 cucharaditas azúcar; 1/2 cucharadita guindilla molida; 1 cucharadita albahaca seca; 625 g mozzarella; parmesano rallado; pan rallado; sal; pimienta.

Preparación: Quitar los extremos de las berenjenas, lavar bien y secar. Por comodidad he preferido cortar las berenjenas en láminas redondas en lugar de alargadas, de medio cm de grosor. Dejar en un escurridor de pasta espolvoreadas con sal para que suelten el agua amarga durante 15 minutos. Lavar y secar con papel absorbente.

En una cacerola poner a fundir la mantequilla y mezclar con unas cucharadas de aceite y sofreír las cebollas y los ajos pelados y picados con el robot durante 10 minutos. Añadir la harina y remover. Pelar los tomates, triturar con el robot y añadir la pulpa a la cacerola mezclando bien. Sazonar con la guindilla y albahaca, rectificar de sal y pimienta, añadir el azúcar  y dejar cocinar a fuego suave durante 1 hora.

Pasar por harina ligeramente las láminas de berenjena y freír en aceite por ambos lados. Sacar en cuanto se doren y poner sobre papel absorbente.

En una fuente apta para el horno, ligeramente engrasada, poner una capa de berenjenas, encima cubrir con una fina capa de pan rallado y parmesano rallado, después cubrir con la salsa de tomate y encima poner la mozzarella cortada en láminas finas. Repetir las capas en el mismo orden hasta acabar los ingredientes. Es importante que la parmigiana quede bien impregnada de salsa de tomate.

Hornear a 180 ºC durante 30 minutos hasta que esté fundida la mozzarella y servir caliente.



La parmigiana di melanzane, también conocida como melanzane alla parmigiana (berenjenas a la parmesana) o simplemente parmigiana es un plato de origen dudoso y objeto de mucho debate. Hay quien dice que su origen está en Puglia, otros que en Sicilia y otros (como el libro de donde hemos sacado la receta que reproducimos hoy) que es originario de Campania. Lo que si es cierto es que ha sido incluida en la lista de productos agroalimentarios tradicionales italianos.


Es un plato un tanto laborioso de hacer (sobre todo vais a gastar papel de cocina jejejejeje) y que requiere tiempo pero el resultado es espectacular. Vale la pena tomarse el tiempo de hacer la salsa de tomate (que, por cierto, he doblado en cantidades porque no quería quedarme corta) porque es sencillamente deliciosa. ¡Os la recomiendo! Os dejo como siempre la receta original:

 
La cucina regionale italiana in oltre 5000 ricette (Alessandro Molinari Pradelli)

Y ahora vamos con las contribuciones de las participantes de este mes que han sido muchas y son todas una maravilla ¡GRACIAS!

Rosalía, desde Rosgastronómica, dice que la berenjena es una de sus hortalizas preferidas y esta receta hace tiempo que tenía ganas de publicarla

Nati, desde Poesia culinaria - Sabores de Nati, dice que es una delicia con los mejores sabores, sencilla y con ese gusto a Italia

Mabel, desde Mabel´s kitchen, se estrena en el reto con su preciosa y sabrosa versión individual ¡bienvenida!

Mª José, desde Aquí se cuece jugando, siente curiosidad por la receta dulce pero nos ha preparado una fantástica versión de la salada


María, desde In my little kitchen, también se estrena en el reto que, por cierto, le está encantando...¡y yo que me alegro, bienvenida!


Mar, que es habitual en el reto, nos trae también su versión en ración individual porque le encantan las berenjenas


Cristina, desde Cuinem?, nos explica que le ha venido como anillo al dedo porque le habían regalado un montón de berenjenas...¡genial! 


Marisa, desde Thermofan, le ha gustado la propuesta y ha preparado su versión adaptada sin parmesano pero igualmente rica


Marga, desde Azafranes y canelas, también se estrena en el reto y nos invita a probar su bocado apetitoso...¡mmmm! ¡bienvenida!


Rosa, desde Un toque de canela, me ha sorprendido eligiendo la propuesta salada que, por cierto, ¡tiene una pinta estupenda!


Rosa, desde Cocineando con Rosa, ha compartido su plato con su vecina y ambas comparten la misma opinión ¡estaban exquisitas!


Estela, desde La cocina de Estela, también se estrena en el reto con una ración individual bien generosa ¡bienvenida!


Kety, dede Crocketypot, se estrena en el reto y, aunque casi no llega dice, nos trae su versión que le ha encantado ¡me alegro mucho, bienvenida!


Encarnita, desde El paraíso de los golosos, otra nueva participante en el reto que tenía muchas ganas de hacer este plato ¡bienvenida!


Y finalmente Elena, desde Miss Pimienta, y superando todas las adversidades ha conseguido preparar esta delicia ¡bienvenida!


¡Nos vemos el mes que viene con nueva propuesta y anfitriona!