Está claro que esto no sería un blog completo si no estuviera un clásico de nuestra cocina como es la tortilla de patatas o tortilla española, nombre éste último utilizado para diferenciarla de la tortilla francesa que no lleva patata.
El primer documento conocido en el que aparece una referencia a la tortilla de patatas es navarro, allá por 1817. La leyenda dice, sin embargo, que fue el general Tomás de Zumalacárregui quien, durante el sitio de Bilbao, inventó la tortilla de patatas como plato sencillo, rápido y nutritivo con el que saciar las penurias del ejército carlista. Otra versión (entre nosotros, más creíble) afirma que lo inventó una anónima ama de casa navarra, en cuya casa paró el mencionado general, que era pobre y lo único que tenía eran huevos, cebolla y patatas, así que acabó haciendo un revuelto con todo ello, revuelto que gustó mucho al general, quien luego la popularizaría...
El primer documento conocido en el que aparece una referencia a la tortilla de patatas es navarro, allá por 1817. La leyenda dice, sin embargo, que fue el general Tomás de Zumalacárregui quien, durante el sitio de Bilbao, inventó la tortilla de patatas como plato sencillo, rápido y nutritivo con el que saciar las penurias del ejército carlista. Otra versión (entre nosotros, más creíble) afirma que lo inventó una anónima ama de casa navarra, en cuya casa paró el mencionado general, que era pobre y lo único que tenía eran huevos, cebolla y patatas, así que acabó haciendo un revuelto con todo ello, revuelto que gustó mucho al general, quien luego la popularizaría...
Ingredientes: 3 patatas; 4 huevos; 1/2 cebolla; sal; aceite.
Preparación: Pelar las patatas y cortarlas en rodajitas muy finas. Pelar la cebolla y picarla menuda. En una sartén poner abundante aceite a calentar y freir las patatas y la cebolla a fuego lento, de forma que no se doren sino que se cuezan y queden blanditas.
Batir los huevos. Extraer las patatas y cebolla del aceite escurriendo muy bien y mezclar con los huevos. Añadir sal.
Quitar el aceite de la sartén y cuando esté caliente añadir la mezcla anterior, repartiendo bien para que cubra toda la base. Dejar que cuaje a fuego fuerte y, cuando esté hecha por un lado, con la ayuda de un plato darle la vuelta y cuajar el otro lado.
Si se quiere que la tortilla quede más esponjosa se pueden batir primero las yemas y añadir las claras bien batidas después, mezclando bien. O bien se puede añadir un chorrito de leche a los huevos batidos.