Tercer domingo de mes y toca reto Cocinas del Mundo y, como siempre por estas fechas, tenemos la edición especial de verano que nos invita a proponer recetas veraniegas de cualquier parte del mundo. Ya he dicho muchas veces que nunca he faltado a ningún viaje en este reto pero es verdad que en las ediciones de verano el país que más he visitado ha sido Italia (¿por que será?) así que para esta vez he decidido quedarme en casa.
La receta que os traigo es una de mis bebidas favoritas en esta época del año pero, como comprenderéis, en Holanda ni se sabe lo que es ni por asomo la encuentras en el supermercado. Claro que si tienes una amiga tan generosa como Marisa que va y te consigue chufa ecológica de Alboraia de primera calidad y te la regala envasada al vacío, te conviertes en la mujer más feliz del mundo porque entonces ¡vas a poder preparar la horchata casera!
Y así ha sido...¡y menuda diferencia! Además, la horchata artesanal no contiene lactosa o gluten por lo que es ideal para este tipo de intolerancias. Para la receta he seguido sus consejos pero he rebajado la cantidad de azúcar y me salido como a mi me gusta. No os digo más que a Danny no le gusta la horchata de nunca y ¡casi se ha bebido el litro el solito!
Ingredientes: 250 g chufa; 1 l agua; 100 g azúcar; piel de limón; 1 cucharadita canela molida.
Preparación: La chufa que yo tengo es seca por lo que se puede guardar perfectamente en un recipiente hermético. Para preparar la horchata tendremos que hidratarla.
Dejar la chufa en remojo en agua fría durante 24 h (cambiar el agua al menos 1 vez). Tirar el agua y poner la chufa remojada en el vaso de la batidora junto con el azúcar, la piel de limón (sin parte blanca que amargue) y la canela, añadir el agua fría y batir a velocidad máxima.
Pasar esta preparación a un recipiente con tapa y dejar toda la noche en la nevera para que coja bien el sabor de la chufa.
Al día siguiente colar por un colador fino apretando bien con el reverso de un cucharón para extraer el máximo de horchata y envasar el líquido en una botella que conservaremos en la nevera durante 2 días máximo.
El resto que nos queda en el colador (la pulpa de la chufa) no lo tiréis porque lo reutilizaremos para preparar un bizcocho que os contaré otro día. Como sale bastante cantidad yo lo envaso en bolsitas individuales de unos 100 g y lo congelo.
Pues con esta receta tan deliciosa participo en Cocinas del Mundo - Verano y os deseo unas felices vacaciones. Yo me marcho a descansar y volveré con más recetas ricas 💋
La receta que os traigo es una de mis bebidas favoritas en esta época del año pero, como comprenderéis, en Holanda ni se sabe lo que es ni por asomo la encuentras en el supermercado. Claro que si tienes una amiga tan generosa como Marisa que va y te consigue chufa ecológica de Alboraia de primera calidad y te la regala envasada al vacío, te conviertes en la mujer más feliz del mundo porque entonces ¡vas a poder preparar la horchata casera!
Y así ha sido...¡y menuda diferencia! Además, la horchata artesanal no contiene lactosa o gluten por lo que es ideal para este tipo de intolerancias. Para la receta he seguido sus consejos pero he rebajado la cantidad de azúcar y me salido como a mi me gusta. No os digo más que a Danny no le gusta la horchata de nunca y ¡casi se ha bebido el litro el solito!
Ingredientes: 250 g chufa; 1 l agua; 100 g azúcar; piel de limón; 1 cucharadita canela molida.
Preparación: La chufa que yo tengo es seca por lo que se puede guardar perfectamente en un recipiente hermético. Para preparar la horchata tendremos que hidratarla.
Dejar la chufa en remojo en agua fría durante 24 h (cambiar el agua al menos 1 vez). Tirar el agua y poner la chufa remojada en el vaso de la batidora junto con el azúcar, la piel de limón (sin parte blanca que amargue) y la canela, añadir el agua fría y batir a velocidad máxima.
Pasar esta preparación a un recipiente con tapa y dejar toda la noche en la nevera para que coja bien el sabor de la chufa.
Al día siguiente colar por un colador fino apretando bien con el reverso de un cucharón para extraer el máximo de horchata y envasar el líquido en una botella que conservaremos en la nevera durante 2 días máximo.
Pues con esta receta tan deliciosa participo en Cocinas del Mundo - Verano y os deseo unas felices vacaciones. Yo me marcho a descansar y volveré con más recetas ricas 💋