Hoy es día 10 y, como viene siendo habitual, toca nueva propuesta de las chicas de La Cocina Typical Spanish. En esta ocasión nuestra anfitriona es Leila, de
La nueva cocina de Leila, quien nos propone sacar "a la calle" nuestras mejores tapas porque...¿hay algo más TS que el tapeo?
Me identifico mucho con Leila, que vive en Alemania, cuando dice que "cada vez que alguien de allí sabe que es española, lo primero que hace es nombrarle las tapas"...porque a mi me pasa lo mismo viviendo en Holanda. No hay nada que les guste más a los holandeses que las tapas españolas así que cada vez que hago una fiesta en casa y viene mi familia holandesa ¡no pueden faltar!
Pero empecemos la historia por el principio...Resulta que, antes de recibir la propuesta de este mes, mi Danny me trajo del turco cerca de su trabajo unos panes redondos que preparan muy muy ricos. Estos panes son como hogazas redondas muy tiernas y me dije que sería ideal usarlo para preparar una tapa que me rondaba por la cabeza desde hace mucho. Y cuando la tenía para publicar me llegó esta propuesta y me dije ¡fantástico! ¡esta es la oportunidad de darla a conocer!
La tapa que os traigo hoy es, probablemente, la más emblemática y exclusiva de Almería, la ciudad en la que me crié y viví hasta mi temprana juventud. Si alguien no ha ido nunca de tapas por Almería se ha perdido lo más grande y es que, sin desmerecer otros lugares de mi Andalucía del alma, como el tapeo de Almería pocos vais a encontrar. ¡Palabrita!
El origen del sherigan (también lo encontraréis escrito como cherigan o cherican aunque yo he respetado el nombre que aparece en la puerta del bar) se remonta a la década de los años 50 y al momento en que abrió sus puertas el Parrilla Colón, un bar de tapas a espaldas del popular Café Colón y que fue el creador de esta tapa. El nombre de la tapa parece ser que viene del apodo del encargado del Parrilla Colón de aquel entonces, a quien llamaban el Sheriff por sus dotes de mando. La tapa en si, hecha sobre una rebanada de pan muy larga, se asemejaba al arma del sheriff (sheriff gun) y la particular pronunciación almeriense hizo el resto, transformándola en sherigan...
Aquel Parrilla Colón cerró en 1973 pero su legado permanece en el Parrilla Pasaje y en el nuevo Café Colón, donde se pueden continuar degustando los tres sherigans originales: el de jamón york, el de atún o el de anchoas. ¡Cuantas veces habremos quedado ahí para tapear!
Precisamente he querido recrear los tres principales tipos de sherigan en esta entrada, aprovechando el famoso pan y que tenía todos los ingredientes en casa. Hoy en día, sin embargo, admite lo que sea, siempre que la base sea el pan tostado cubierto con alioli. ¡Os aseguro que están de escándalo!
Ingredientes: 6 rebanadas pan (largas); alioli; jamón york; atún (en lata); pimientos asados (de bote); boquerones en vinagre.
Ingredientes para el alioli: 1 huevo; 1 pizca sal; 1 pizca azúcar; 1 cucharada zumo de limón; 1 cucharada vinagre; 2 dientes ajo pequeños; 1 vaso aceite oliva.
Preparación: Para preparar el sherigan se necesita un pan grande del que podáis cortar rebanadas alargadas. Hornear las rebanadas a 180 ºC (arriba y abajo con ventilador) 10 minutos por cada lado.
Mientras cortar el pimiento en tiras y desmenuzar el atún. Preparar un alioli con los ingredientes. Cortar el jamón york en trozos y pasar vuelta y vuelta por una sartén sin aceite.
Untar las rebanadas de pan tostado y caliente con el alioli de forma generosa. Colocar encima el atún desmenuzado (sherigan de atún), el pimiento en tiras y los boquerones en vinagre (sherigan de boquerones) o el jamón york asado (sherigan de york). Servir acompañado de una buena cerveza fresquita.
No sabéis lo feliz que me ha hecho poder compartir esta receta y mis recuerdos gastronómicos. En casa se ha convertido en un clásico y yo encantada de repetirla cuantas veces sea necesario jajajajaja. Y con esta receta tan de mi tierra participo en la iniciativa
#vamosdetapasTS y deseando estoy de ver el resto de propuestas que seguro que me dejan con la boca abierta y babeando...